La EMI es una enfermedad provocada por una bacteria llamada Neisseria meningitidis o meningococo, provocando meningitis (inflamación de las meninges) y sepsis (respuesta grave e inflamatoria).
La EMI es una enfermedad de difícil diagnóstico, debido a la inespecificidad de los primeros síntomas, de desarrollo rápido (24 horas después del inicio puede ser fatal) y en torno al 20% de los infectados pueden padecer secuelas graves.
La prevención de la enfermedad es gracias a la vacunación. Debemos recordar que, por desgracia, los antibióticos que tenemos actualmente no son 100% efectivos en el tratamiento de esta enfermedad, y pierden eficacia cuanto más tarde se administran.
Existen 12 serogrupos de meningococo. De los 12 serogrupos identificados, 6 causan la mayoría de los casos de enfermedad meningocócica invasiva: A, B, C, W, X e Y. Actualmente el serogrupo B es el responsable del 41% del total de casos, y siendo la mayor incidencia en los niños pequeños. Los serogrupos C, W, A y Y son los responsables del resto del total de los casos, viéndose un aumento de los mismos en los últimos años.
La vacuna contra el serogrupo B no está financiada por el sistema de salud. La ACWY tampoco lo está en niños, pero sí en adolescentes ya que éstos son el principal grupo de edad portador y transmisor. Con la vacunación de los adolescentes se evita la diseminación. Si se vacuna de niño/bebé de la ACWY, igualmente durante la adolescencia se administra la dosis de recuerdo.
Prevengamos una enfermedad muy grave.